viernes, 7 de abril de 2017

Sobreviviendo a una mala Date


 Lo que innumerables películas de Disney no se molestaron en decirnos es que toda historia de amor con un final feliz comenzó con dos personas solteras. Tampoco se molestaron en aclarar a cuantos marineros tuvo que stalkear Ariel antes de conocer a Eric y ni hablar de la alineación de planetas que hizo posible que ese hombre perdido en altamar fuese el único príncipe heredero de un reino y no un ladrón fugitivo (Jazmín no tuvo tanta suerte).

Pero sin entrar en el debate de la existencia de los príncipes azules y finales felices lo cierto es que la vida de soltera eventualmente nos va a llevar a la posición de tener un first date, y en este tema todas sabemos que solo hay dos posibilidades: éxito total o desastre inminente.

 
Por eso es que hoy hemos recurrido a toda la sabiduría condensada en el equipo de La Majestuosa para enumerar 4 formas de salir vivas de esas dates en las que nos embarcamos que resultan ser desastres inminentes:

1  .   Mantenerlo casual  
Ésta es sin duda la mejor medida preventiva para evitar quedar atrapadas por horas interactuando con lo que bien podría ser un orangután entrenado. Un café, un té o unos cócteles after-office son ejemplos de planes que nos permiten ir pidiendo el Uber apenas tomemos la última gota de ese mojito en caso de un disaster date
 

 2.   Un compromiso previo
Un cumpleaños, la despedida de una amiga, recoger a nuestra (inexistente) tía en el aeropuerto son todas opciones válidas que nos dan un toque de queda para huir en caso que las situación se esté tornando desastrosa. 

3.    Bajarle los humos
Algunas veces más que huir queremos dejarle en claro al orangután de turno que todos sus intentos de seducción serán una gran pérdida de tiempo y energía, y uno de nuestras formas para hacer esto es sacar la carta de “tengo una amiga que sería perfecta para ti”.



4.   Run, Forrest, run
A veces no importa qué tan preparadas estemos, la situación puede salirse de nuestras manos y podemos terminar en cine, viendo el reencauche de Robocop traducido al español y con el orangután texteando durante toda la película (le pasó a una amiga). Es en estos casos extremos en los que nuestro instinto de supervivencia debe coger el control de la situación y hacernos entender que lo mejor que podemos hacer es ir al baño para no volver jamás, sin mirar atrás, sin arrepentirnos de nada.